¿No sabes cuándo hacer deporte? ¿Sabías que el momento del día en que entrenas puede influir en cómo te sientes, en tu rendimiento e incluso en tus resultados? Aunque lo más importante es moverse, conocer las ventajas de cada franja horaria puede ayudarte a sacarle el máximo partido a tus entrenamientos.

Mañana (6:00 – 9:00 AM)

Entrenar temprano activa tu metabolismo, mejora la concentración y te da un chute de energía para empezar el día con buen pie.

Ideal si quieres incorporar una rutina constante y ganar disciplina.

Mediodía (12:00 – 3:00 PM)

En estas horas, tu cuerpo ya ha calentado naturalmente, lo que mejora el rendimiento, sobre todo si haces entrenamientos de fuerza.

Perfecto para quienes pueden tomarse un descanso a mitad del día.

Tarde (5:00 – 8:00 PM)

La temperatura corporal está en su punto óptimo, los músculos responden mejor y es más fácil rendir al máximo.

Excelente para liberar el estrés del día y superar tus marcas.

Noche (9:00 – 11:00 PM)

Puede ser una buena opción para ejercicios suaves como estiramientos o yoga.
Eso sí, evita actividades muy intensas para no afectar tu descanso.

No hay una “mejor hora universal” para hacer deporte. ¡La clave está en encontrar el momento que encaje contigo y mantenerte constante!

¿Y tú, cuándo prefieres hacer deporte?

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